La astrología carece totalmente de base científica alguna. Todos los objetos ejercen sus fuerzas gravitatorias sobre los demás según la ley de la gravitación universal de Newton, pero no tiene ninguna base científica indicar que las estrellas y constelaciones lejanas ejercen alguna influencia decisiva en el nacimiento de las personas. La fuerza gravitatoria ejercida por el médico o la madre es mucho mayor que la ejercida por la estrella más cercana, Alfa Centauro. Incluso la radiación electromagnética de una lámpara es mucho mayor que la recibida del espacio. Además, nunca dos gemelos o mellizos sufren exactamente la misma suerte y resultaría difícil creer que todos los afectados por alguna gran catástrofe estén influenciados por las constelaciones de igual manera. Muchos científicos del mundo (incluyendo muchos premios Nobel), firmaron un manifiesto en el que dejaban claro que la astrología y los horóscopos carecen totalmente de base científica, y son áreas aprovechadas hábilmente por "charlatanes".
Sin embargo, el ser humano siempre ha necesitado y necesitaremos creer en algo; dá igual que sea a cualquier "visionario" que nos lea el futuro, el sol, la tierra, Buda, los Dioses del Olimpo, Alá o Jesucristo. Quizás creamos porque en nuestro interior algo nos dice que existe algo más, pero no lo sabemos realmente. ¿Será porque no lo vemos?.
Imagina un mundo en dos dimensiones: yo soy un cuadrado que tengo "ancho" y "largo". Si en mi mundo plano entra otro cuadrado que tambien dispone de "alto" (que yo no veo), dispone de una tercera dimensión, y si pegase un salto, ¡desaparecería de mi vista!. El que yo no lo vea, no significa que no exista ese cuadrado con altura.
Con esto te diría, si quieres que te diga la verdad, que creo en los billetes de 500 euros, (aunque creo que están en otra dimensión que yo no veo), y al parecer, los "charlatanes" saben muy bien que existen, así que mucho cuidado con lo que crees, y sobre todo, a quién crees. Suerte.