Los científicos planetarios modernos a veces afirmaban que la colisión de un cometa con un planeta podría suponer una considerable contribución a la atmósfera planetaria. Por ejemplo, toda el agua presente actualmente en la atmósfera podría explicarse por el impacto reciente de un cometa pequeño. Newton señaló que la materia de la cola de los cometas se disipa en el espacio interplanetario, se desprende del cometa y poco a poco es atraída por la gravedad hacia los planetas cercanos.
Ya en 1869 el astrónomo William Huggins encontró una identidad entre algunos aspectos del espectro de un cometa y el espectro del gas natural u "olificante". Huggins había encontrado materia orgánica en los planetas; años despues se identificó en la cola de los cometas cianógeno (CN), consistente en un átomo de carbono y uno de nitrógeno, el fragmento molecular que produce los cianuros. Cuando la Tierra en 1910 estaba a punto de atravesar la cola del cometa Halley mucha gente se aterrorizó, porque no tuvo en cuenta que la cola de un cometa es extraordinariamente difusa. El peligro real del veneno presente en la cola de un cometa es bastante menor que el peligro que ya en 1910 suponía la polución industrial de las grandes ciudades de aquellos años.
Me pregunto que habrían pensado por aquel entonces de catástrofes como la de Fukushima. No es nada gratificante el ver que vamos a peor.