Reflexiones

Exceso que sobra

Avaricia, oh, avaricia, pena de avaricia. Qué pena no poder tener otro nombre, otro significado. Base de muchos excesos y ninguno bueno. De tantos finales de poder haber tenido has elegido uno de los peores; de tantos espacios abiertos has cogido el espacio mas cerrado, el mas rápido para llegar al fin, ese fin tan oculto para algunos, pero visible para todos. Nombre corto y no feo, pero no con final nefasto, donde el camino se bifurca... y no te ENTERAS. Avaricia que no tienes fin, aclárate y busca... busca algo diferente y con otra visión, esa visión que nunca habías visto de cerca; sí; esa que pasaba cerca de tí pero que te parecía extraña porque la veía otro que no eras tú. ¿Y qué?. Lo bueno es que ese otro no era igual que tú.....  ¡mejor!...  entérate ya de una vez.  No eres única, y eso no es malo, no todo es para tí...  al fin y al cabo siempre puede haber alguien a quien acudir...  aunque no te lo puedas creer ni te lo merezcas.

Yo me ofrezco.

Personas o máquinas

Ultimamente estoy apreciando la falta de humanidad y amabilidad que algunas personas tienen sobre otras. Si entras en algun comercio ya sea de ropa, muebles, banco, bar, etc, parece que las personas son menos profesionales, te atienden como si fueran máquinas ya predispuestas a contestar ciertas palabras y con cierta rigidez, te hablan como si lo hicieran a traves de un chat, o simplemente no te miran, no te atienden, o ya mas fuerte, te despachan sin terminar de hablar por el móvil. Y si ya entras dando los buenos días, dando las gracias por indicarte cualquier cosa, o poniéndote al final de la cola, te toman por tonto.

Cierto es que yo voy con respeto y educación voy a todos los sitios, pero es que últimamente esos sitios cada vez son menos. Me parece penoso que personas de mi tierra donde nací y vivo (orgulloso que estoy de ella) se comporten de esta manera. ¿Pero es que no se dan cuenta que no es el camino correcto?.

Si yo prefiriera las máquinas a las personas no me levantaría de donde estoy escribiendo, aunque soy humano y creo que estoy capacitado para darle a cada cual lo suyo, o al menos intento diferenciar entre persona y máquina. Me encantan los botones, siempre se me han dado bien, y las personas quizás no tanto, pero resulta que mi trabajo se realiza sobre todo en el trato directo con las personas, y la diferencia entre máquinas y personas ¡ES MUY GRANDEEEEE!. Por favor, vamos a diferenciar de una puñetera vez. Gracias.

Por derecho y por la derecha

Desde aquí quisiera hacer una reflexión sobre las malas costumbres que estamos cogiendo habitualmente todas las personas sobre la forma de conducir y el trato a los demas. Entiendo que todos tenemos prisas para resolver nuestros asuntos, para ir al trabajo, para entrar en el cine o el autobus, por pillar una oferta gratis de cualquier tipo, etc., pero de ahí hasta avasallar a los demas, indica que lo que nos sobra de persona zafia, nos falta de educación. El hecho de circular con el vehículo por la zona izquierda (zona rápida) y a la velocidad que nos dá la gana es una muestra de que nos creemos superiores a los demas, ya que no nos importa el que venga por detras.

Pero resulta que tus derechos terminan donde empieza el derecho de los demas, en cuyo caso habría que hablar de respeto mutuo, cosa que brilla por su ausencia últimamente. Es penoso que una persona actual, despues de tantos años de evolución, que podríamos aprender de lo que ha pasado en tiempos anteriores (porque tenemos constancia) y de tantos errores que hemos cometido, sigamos cometiendo los mismos fallos o peores y no nos demos cuenta ¡qué estúpidos!.

Pero ¿sabes qué?, que de vez en cuando se tropieza con alguien que vá por derecho en esta vida, que te da las gracias cuando la dejas pasar antes, que se aparta a un lado para abrirte paso, que te recoge lo que se te ha caído, personas altruístas que parecen que han evolucionado un poco mas que los demas. A todos ellos les deseo que no cambien nunca y que enseñen esos valores, que eso del eslabón perdido entre el mono y el hombre son cosas del pasado y son de mucho mucho mucho tiempo atras. A todos ellos ¡GRACIAS!.

Desde luego, hay que ver cómo está el mundo ...



Jeje , Pero si está en su sitio, y ademas no se ha vuelto cuadrado, ni chorrea, ni se cae, ni se expande, ni na de ná. Entonces ................ ¿De qué nos quejamos?. Desde luego, hay que ver que nos quejamos casi por cualquier cosa. Si de verdad piensas el "porqué nos quejamos", nos damos cuenta de que todas las personas somos diferentes, con lo cual, la forma de actuar y de pensar de cada una pueden llegar a ser totalmente opuestas, lo que nos lleva a la conclusión de que lo que es bueno para unos, es malo para otros, y eso nos hace enfadar, irritar y hasta gritar. Pero, en fin, quejarse no cuesta nada , y ademas así, ¡ UNO SE DESAHOGAAAAAAAAAAAaaaaaaa !.

Ufff, que agusto me he quedado.